Psicología Infantil y/o Adolescente, Asesoría Familiar
En la educación de nuestros hijos intervienen múltiples factores, de los más relevantes encontramos la escuela, la familia, pero el más relevante, sin duda, somos nosotros: los padres.
Pensar en tener hijos, desearlos, gestarlos son experiencias intensas, estimulantes, de las experiencias más gratificantes desde un punto de vista trascendental. Ver nacer a un hijo es una experiencia sublime desde el punto de vista emocional.
A medida que avanza el tiempo y nuestros hijos crecen empezamos a sentir que se nos plantean muchas situaciones en las que somos conscientes de que nuestros hijos “vienen sin manual de instrucciones”.
Tiramos de sentido común, de la experiencia de nuestros mayores, preguntamos a nuestros amigos, compramos libros que nos sirven de guía. En ocasiones nos ayuda y resolvemos la situación, pero en otras ocasiones no nos quedamos satisfechos, nos ronda la idea de que no estamos acertando ¿Por qué no pensar en que nos asesore un profesional, alguien que nos guíe y que nos aporte esa seguridad que necesitamos al criar a nuestros hijos? Alguien que realmente ha hecho visible ese manual de instrucciones que pensábamos que no existía.
“Supongo que es tentador tratar todo como si fuera un clavo, si la única herramienta que se tiene es un martillo”
– Abraham Maslow.
A lo largo del desarrollo de nuestros hijos, vamos a encontrarnos muchos momentos en los que necesitamos de ese asesoramiento.
Cuando son más pequeños y no pueden decirnos lo que les conviene, qué aspectos son interesantes en cuestiones relacionados con la autonomía:
Autonomía:
- En qué momento deben empezar a dormir solos. Aspectos que son aconsejables para que ocurra de una manera gratificante.
- Las primeras separaciones físicas. Como empezar progresivamente a pasar tiempo sin mamá y papá. Que signos da el niño/a de cómo está aceptando esa situación.
- El control de esfínteres. En qué momento hay que quitar pañales, como podemos reforzar a nuestros hijos
O respecto a miedos evolutivos:
- Como comportarnos cuando observamos que nuestro hijo se angustia.
- Las pesadillas, terrores nocturnos, fobias, por qué aparecen, de que son signo, qué podemos hacer nosotros.
La inteligencia emocional:
- Que piensan, que sienten. Que postura debemos adoptar nosotros. Debemos favorecer que expresen sus sentimientos?
- La importancia de la expresión emocional. Porque es importante reconocer sentimientos negativos. Como ayudarles a superar las situaciones adversas.
La socialización
- La comunicación. Que momentos debemos buscar para hablar.
- Compartir, trabajar en grupo. Necesitamos a los demás y tenemos que aprender a compartir y relacionarnos.
- Normas, responsabilidad, limites: aprender a respetar los límites, que nuestros actos tienen consecuencias. Aprender a decir que no, etc…
Y en la adolescencia:
- La importancia del grupo de iguales. Saber la importancia que tiene para ellos su grupo de iguales. Ayudarles a establecer relaciones sanas. Prevenir el bullying.
- La individualización. Ayudarles a crecer, a tener criterio propio, a elegir y responsabilizarse.
- La llegada de la sexualidad. Resolver dudas con naturalidad, desmontar falsos mitos y peculiaridades.
- La autoridad, la rebeldía. Entender que la adolescencia es un periodo turbulento y como relacionarse con ellos con una actitud comprensible, mostrarnos firmes en los momentos adecuados pero flexibles en otros.
Una persona, al descubrir que es amada por ser como es, no por lo que pretende ser, sentirá que merece respeto y amor.
– Carl Rogers.
